“Como un lazo...”
LAS 10 PLAGAS DE EXODO EN REVELACION
Revelación nos presenta la ira de Yah y del Cordero sobre aquellos que no tienen Su sello o Su nombre sobre sus frentes, en las siete plagas que se encuentran en los siete Sellos, las siete Trompetas y las siete Copas.
Por dos veces en el Texto Revelado se nos muestra la terquedad de los hombres enemigos de Elojiym, igual que lo fue Faraón, igual que lo son hoy la mayoría.
En Rev. 9:20 ...Y los otros hombres que no fueron muertos con estas plagas, ni así se arrepintieron de las obras de sus manos, ni dejaron de adorar a los demonios, y a las imágenes de oro, de plata, de bronce, de piedra y de madera, las cuales no pueden ver, ni oír, ni andar.
En Rev. 16:8...El cuarto ángel derramó su copa sobre el sol, al cual fue dado quemar a los hombres con fuego. Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Elojiym, que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria.
PLAGAS DE ÉXODO EN REVELACION
Comparativa entre las plagas de Egipto con las Trompetas y las Copas de Revelación:
La plaga de sangre es la primera con la que Yah castiga a Faraón, la cual sigue vigente en la primera Trompeta y está en la segunda y tercera Copa. Ex. 7:20 en Ap. 16:4. ...El tercer ángel derramó su copa sobre los ríos, y sobre las fuentes de las aguas, y se convirtieron en sangre.
La plaga de ranas es un símbolo de inmundicia, lo que equivale a la soberbia contra Elojiym, la cual desemboca en la guerra contra Él y es antesala de Armagedón, lo cual fue y es y será castigado de Su parte, y aparece en la sexta Copa. Ex. 8:6 en Ap.16:13. ...Y vi salir de la boca del dragón, y de la boca de la bestia, y de la boca del falso profeta, tres espíritus inmundos a manera de ranas; 14 pues son espíritus de demonios, que hacen señales, y van a los reyes de la tierra en todo el mundo, para reunirlos a la batalla de aquel gran día del Elojiym Todopoderoso. 15 He aquí, yo vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela, y guarda sus ropas, para que no ande desnudo, y vean su vergüenza. 16 Y los reunió en el lugar que en hebreo se llama Armagedón.
La plaga de piojos, moscas y ganado no aparecen explícitamente en Revelación, están sin embargo incluidas en las diversas plagas. Los piojos son los parásitos que están en el sistema de la sociedad que oprime y va sacando la vida para sobrevivir. La molestia de las moscas está en la falta de paz y el ganado muere por las plagas y pandemias porque los ríos convertidos en sangre traen contaminación, de modo que el alimento está contaminado también.
La plaga de úlceras siempre ocurre sobre los opositores a Yah, de nuevo la soberbia trae la oposición contra Elojiym, y ¿quién podrá vencer contra Él?, la encontramos en la primera Copa. Ex. 9:9 en Ap. 16:2. ...y vino una úlcera maligna y pestilente sobre los hombres que tenían la marca de la bestia, y que adoraban su imagen.
La plaga de granizo la encontramos en la primera y séptima Trompeta y en la séptima Copa. Ex. 9:23 en Ap. 8:7 y 11:19. ...y hubo granizo y fuego mezclados con sangre, que fueron lanzados sobre la tierra; y la tercera parte de los árboles se quemó, y se quemó toda la hierba verde... y...Y el templo de Elojiym fue abierto en el Cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.
La plaga de langostas (אַרְבֶּה (arbe) langosta) se nos muestra en la quinta Trompeta, descritos con todo detalle, que matan a la población de las Dos Casas de Israel. Ex. 10:13 en Ap. 9:1 al 12. ... 1 El quinto ángel tocó la trompeta, y vi una estrella que cayó del cielo a la tierra; y se le dio la llave del pozo del abismo. 2 Y abrió el pozo del abismo, y subió humo del pozo como humo de un gran horno; y se oscureció el sol y el aire por el humo del pozo. Y del humo salieron langostas sobre la tierra;(A) y se les dio poder, como tienen poder los escorpiones de la tierra. 4 Y se les mandó que no dañasen a la hierba de la tierra, ni a cosa verde alguna, ni a ningún árbol, sino solamente a los hombres que no tuviesen el sello de Elojiym en sus frentes. 5 Y les fue dado, no que los matasen, sino que los atormentasen cinco meses; y su tormento era como tormento de escorpión cuando hiere al hombre. 6 Y en aquellos días los hombres buscarán la muerte, pero no la hallarán; y ansiarán morir, pero la muerte huirá de ellos. El aspecto de las langostas era semejante a caballos preparados para la guerra; en las cabezas tenían como coronas de oro; sus caras eran como caras humanas; 8tenían cabello como cabello de mujer; sus dientes eran como de leones; 9tenían corazas como corazas de hierro; el ruido de sus alas era como el estruendo de muchos carros de caballos corriendo a la batalla; 10tenían colas como de escorpiones, y también aguijones; y en sus colas tenían poder para dañar a los hombres durante cinco meses. 11Y tienen por rey sobre ellos al ángel del abismo, cuyo nombre en hebreo es Abadón, y en griego, Apolión.
Shoftiym 7:12 Y los madianitas, los amalecitas y los hijos del oriente estaban tendidos en el valle como langostas en multitud, y sus camellos eran innumerables como la arena que está a la ribera del mar en multitud. (Compara a los hijos del oriente con las langostas que provienen del este de Egipto, es decir, de Arabia y del resto de países árabes.)
El pozo del abismo: fácil de identificar como una referencia a los países árabes con sus desiertos, tierras desoladas y regiones deshabitadas. Conlleva un simbolismo doble en referencia al origen diabólico de su religión. Su aparición repentina e inesperada los llevó a extenderse de la nada, es decir, del “abismo”, como un imperio conquistador.
Humo: símbolo de dispersión (Sal 68:2). Salmo 68:2 Como es lanzado el humo, los lanzarás; Como se derrite la cera delante del fuego, así perecerán los impíos delante de Elojiym.
Langostas: símbolo de un ejército innumerable
Juec 6:3-5 3 Pues sucedía que cuando Israel había sembrado, subían los madianitas y amalecitas y los hijos del oriente contra ellos; subían y los atacaban. 4 Y acampando contra ellos destruían los frutos de la tierra, hasta llegar a Gaza; y no dejaban qué comer en Israel, ni ovejas, ni bueyes, ni asnos. 5 Porque subían ellos y sus ganados, y venían con sus tiendas en grande multitud como langostas; ellos y sus camellos eran innumerables; así venían a la tierra para devastarla.
La arena seca y caliente era el hogar de la plaga de la langosta, y cuadra con los guerreros que salían cabalgando por el desierto bajo el grito de batalla: Alla akkbar, “Dios es grande”, la misma expresión hecha después de cada atentado terrorista.
Caballos: los montaban para ir a la guerra, en contraste con el estilo de conquista romano que se dio mayormente a pie.
Cabellos de mujer: “tradicionalmente montaban sólo yeguas en batalla, a las que llamaban banat er rih , o ‘hijas del viento'. [“El ruido de sus alas era como el estruendo de carros con muchos caballos que corren a la batalla” (v. 9)]. Los ‘Árabes' [nombre de sus caballos] también jugaron un papel clave en la difusión del Islam. Mahoma declaró que por cuidar este caballo en vida, los fieles serían redimidos después de la muerte. Las invasiones musulmanas introdujeron los ‘Árabes' en el Norte de África y el Sur de Europa en donde influenciaron el desarrollo de caballos de raza adicional”. También se ha aplicado la cara de hombre y cabellos de mujer a la larga Cofia que suelen usar los árabes.
Escorpión: “Su repentina aparición donde nadie podía esperarla fue siempre la base fundamental de la táctica beduina”.
El Sello: Notemos que el pasaje de Rev. 9:4 no habla de los que tienen el sello de Elojiym, sino de los que no lo tienen. Mientras que en la terrible advertencia final del tercer ángel de Rev. 14, los que reciben la marca de la bestia en lugar del sello de Elojiym van a ser atormentados “con fuego y azufre ante los ángeles kadoshim y ante el Cordero”, sin que tengan alivio en su tormento hasta ser consumidos (Rev. 14:10-11; 20:9); los que no tienen el sello de Elojiym en sus frentes en la época de la quinta trompeta son atormentados sin que la herida que recibieron fuese todavía mortal (Rev. 9:5).
“Soldados de a caballo” se describen para la sexta trompeta, lo que confirma que se trató de la misma clase de gente, aunque ahora bajo los turcos otomanos.
Las características únicas de las invasiones islámicas, pues, no dejaban ninguna duda para los intérpretes historicistas que vivían en esa época. Ellos no eran futuristas que anunciaban ya el tiempo del fin, y relegaban todo mensaje profético para el final. Reconocieron, simplemente, que se encontraban en la época de la quinta y sexta trompetas, respectivamente. El fin vendría después que expirase ese azote musulmán sobre el cristianismo romano occidental, es decir, sobre Babilonia (Rev. 9:14). Y esto ocurriría cuando sonase la séptima trompeta (Rev. 10-11).
Ellos veían la invasión de la langosta como un Jihad islámico mundial, o guerra santa.
Ellos enseñaban que de este humo doctrinal vendría un ejército como langostas, un ejército musulmán. Sería formado de soldados sedientos de sangre, con turbantes como cabelleras. Y se desbocarían nación tras nación, reforzando la religión islámica, el Kalifato Global.
Hoy, líderes y diplomáticos están declarando, "El Islam es una religión de paz." Pero todo en la historia del Islam grita contra esto. La verdad es que, el Islam nació en violencia, y ha sido desde entonces una religión de espada. Los Mulas y Ayatolás refuerzan las leyes del Islam azotando a las personas y cortando sus dedos, miembros o cabezas. Tales prácticas brutales son comunes en muchas naciones musulmanas, incluyendo Afganistán.
Es más, en el pecho de, virtualmente, cada musulmán hay un odio innato por los judíos y cristianos, las Dos Casas de Israel. Es casi imposible encontrar un islámico en cualquier parte que crea que Israel tiene derecho a existir.
Los musulmanes pueden denunciar los actos terroristas contra América, pero en el mismo aliento gritan, "Destruyan a Israel." Ven el terrorismo contra Israel como una Jihad justa, una guerra santa sancionada por su fe.
También nos dicen que pocos musulmanes son terroristas. ¿Pero, no es un terrorista alguien que cree que otras personas no tienen derecho a existir? Si tal persona cree que es aceptable aterrorizar a otras personas, es en el fondo un terrorista, aunque nunca levante un dedo para dañar. No tiene que estrellar un jet en un edificio de oficinas. Ya es un terrorista, al regocijarse cuando un judío es atacado o asesinado. Tanto por decir que el Islam sea una religión de paz.
Notemos que en la quinta trompeta tuvo que abrirse el pozo del abismo para que las langostas pudieran salir, esto es, históricamente, para que los árabes pudiesen transformarse en un poder militar espontáneo y expansivo que sacudiese al mundo apóstata de aquellos días.
La plaga de tinieblas está en la quinta Copa, esta es la única plaga que viene sin avisar a Faraón porque es oscuridad espiritual, que no se puede discernir si no se experimenta, cuando buscan la verdad y haya que todas las alternativas de sabios y religiones son muerte espiritual, no traen al Dios vivo. Símbolo de la oscuridad espiritual del mundo y de las religiones de hombres con sus tradiciones. Ciegos guías de ciegos. Ex. 10: 22 en Ap. 16:10. ...El quinto ángel derramó su copa sobre el trono de la bestia; y su reino se cubrió de tinieblas, y mordían de dolor sus lenguas, 11y blasfemaron contra el Dios del cielo por sus dolores y por sus úlceras, y no se arrepintieron de sus obras.
Por último, en décimo lugar tenemos la plaga de los primogénitos que identifico con el fin de la sementera del hombre en la sexta Copa, en la visión del gran río Eufrates que se seca. Es uno de los grandes ríos del Edén, que simboliza el origen de la humanidad. Ex. 12:29 en Ap. 16:12. ...derramó su copa sobre el gran río Eufrates; y el agua de éste se secó, para que estuviese preparado el camino a los reyes del oriente.
A modo de recordatorio, conviene puntualizar que esta última plaga no vino sin antes celebrarse la Pascua, y fue seguida de la petición de consagración de los primogénitos a Elojiym, pasos que debemos seguir todos los discípulos de Yahshuah.
Las plagas finales de las tres exposiciones apocalípticas del castigo de Elojiym sobre el sistema del mundo o proyecto del hombre sin Elojiym, pero asociado al diablo que le engañó en Edén, concluyen con el gran terremoto final de la destrucción: 6º y 7º Sello Rev. 6:12 y 8:5, 7ª Trompeta Rev. 11:19 y 7ª Copa Rev. 16:18.